10 nov 2015

RUBÉN GRACIA "CANI": LA DECISIÓN DE NO ABANDONAR

De uno en uno

Como cada temporada, llega la sección en la que desentrañamos las trayectorias de los nuevos jugadores del Depor. Esta temporada los señalados serán las nuevas altas y aquellos fichajes invernales que sí permanecerán en el equipo.


Rubén Gracia Calmache (Zaragoza, Aragón, España, 3 de agosto de 1981), más conocido futbolísticamente como Cani, comenzó su carrera futbolística en el Real Zaragoza, en las categorías inferiores. En la temporada 2000/01 fue cedido al Utebo, de Tercera División, siendo repescado a la temporada siguiente por el club maño cuando el jugador ya había pensado en dejar de dedicarse a la práctica del fútbol de manera profesional (incluso había escrito una solicitud de trabajo para ser chico de reparto de un conocido supermercado).

La temporada 2001/02, tras jugar 31 partidos con el filial maño y anotar 6 goles, logró debutar en Primera, ya con el equipo descendido, en la última jornada de Liga, ante el Barcelona. Ya Segunda División, Cani se volvió en un jugador vital, y fue partícipe del ascenso del conjunto zaragocista a Primera disputando 25 partidos y anotando 5 goles.

Cani se mantuvo en el equipo maño durante tres temporadas más, hasta la 2005/06 -en la que fue uno de los máximos asistentes de la Liga-, acumulando un total de 97 partidos y 8 tantos, logrando además su primer y único título en su carrera hasta el momento con la consecución de la Copa del Rey en el 2004 ante el Real Madrid por 3-2 en el estadio de Montjuic, en el que Cani acabó expulsado. 
Al finalizar la temporada 2005/06, y debido a malentendidos con Alfonso Soláns Soláns, ex-presidente del Real Zaragoza, a su mala relación con el público de La Romareda y a sus deseos de cambiar de club, Cani acabó haciendo las maletas rumbo a Villarreal, previo pago de 11 millones de euros.

En el club castellonense, Cani se convirtió en uno de los referentes del equipo, tanto dentro como fuera del campo. Con el "submarino amarillo", también logró disputar las dos competiciones europeas, siendo las mejores posiciones los cuartos de final en la Champions en la 2008/09 y las semifinales de la Uefa Europa League en la 2010/11. En la temporada siguiente, el Villarreal descendería a la Segunda División española, regresando a la máxima categoría justo un año después de la mano de Marcelino Toral.

Sin embargo, un encontronazo con el propio Marcelino hizo que en el mercado estival de la temporada 2014/15 Cani se fuese cedido al Atlético de Madrid -donde jugó sólo 4 partidos de Liga- y posteriormente en verano decidiese romper su vinculo con la entidad castellonense para fichar por el Deportivo de la Coruña. Cani dijo adiós así a la que fue su casa durante casi una década, acumulando más de 300 partidos entre todas las competiciones -259 de ellos en Liga, siendo 37 de ellos en Segunda- y anotando 23 goles.
Cani, celebrando un gol con el Villarreal

Cani se convirtió en verano en una de las esperanzas de la afición herculina. Cani es uno de esos interiores a los que una afición mira de forma distinta, un jugador que siempre regala uno o varios detalles por partido, y que cuando decide batir la malla rival se convierte en un gran "ooh" de la afición.
Pese a que una lesión lastró su participación con el Depor en este inicio de Liga, lo cierto es que la grada de Riazor sigue esperando que aparezca parte de ese brillo que tenía Cani al saltar al césped de cualquier campo de España. Su trayectoria es una muestra de que la perseverancia y el trabajo son sinónimo de éxito, un ejemplo para los más jóvenes y un ídolo para las gradas.

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